En los pueblos, el otoño tiene otra presencia.
En los pueblos hay más tiempos, menos velocidad, pero hay autos.
En los pueblos las vecinas barren hojas, las amontonan en las uniones de las calles y las queman.
En los pueblos, las personas que conducen gustan de hacerlo con los vidrios de sus automóviles bajos.
En los pueblos, el humo de las hojas encendidas golpean los lagrimales de l@s que manejan y provoca que l@s que van con el vidrio bajo pierdan el control de sus vehículos.
Durante el otoño, en los pueblos, se queman hojas, se choca más.
En los pueblos hay más tiempos, menos velocidad, pero hay autos.
En los pueblos las vecinas barren hojas, las amontonan en las uniones de las calles y las queman.
En los pueblos, las personas que conducen gustan de hacerlo con los vidrios de sus automóviles bajos.
En los pueblos, el humo de las hojas encendidas golpean los lagrimales de l@s que manejan y provoca que l@s que van con el vidrio bajo pierdan el control de sus vehículos.
Durante el otoño, en los pueblos, se queman hojas, se choca más.
Prosa de una prestigiosa consultora que analiza el por qué de los accidentes de transito.
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