Relajado, pleno. Bebe a sorbos el tinto de montaña. Frutado aroma en su paladar. Estallan risas. Bebe y sigue, ahora hielo. Exquisito. El sistema nervioso central lo nota. Se relaja. La uva en el limbo, la casca frutada la siente en su glándula pineal. Dormitar caminando. Caminando levanta la vista, contempla las estrellas desde el otro lado de la vía.
Ya se fue la primera. Abre la segunda, es de llanura. Ya no hay ganas. Queda a la mitad. Se acuesta, se duerme hondamente y recuerda no tomar el antipsicótico que lo propulse a un descanso posmoderno.
Al otro día, despierta. Desayuna fluoxetina y café negro con cúrcuma.
Rigidez muscular, rigidez muscular, rigidez muscular.
Solo eran dos copas.
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arbolengo