lunes, 9 de agosto de 2021

Gordo

 



He comido mucho durante toda mi vida y lo sigo haciendo.

Durante mucho tiempo fui gordo.

Cuando comencé a serlo, me lo decían y enseguida me enojaba

, y capaz me iba a las manos.

Después no me quedó otra que aceptar las gastadas de una sociedad que se desconoce y de reírme de mi mismo.

Llegó a gustarme que me dijeran "puflo", “bola”, “gomón”, “beluga” y demás cosas.

Si, era todo eso y te llevaba a la hipérbole del enunciado en cuanto adjetivo.

Gordo

, pelo largo

, sin pelos

, cachetes rosados

, tetón.

Una especie de jabalí depilado

o de Bonadeo bonaerense (me cabía el gordo).

Al momento de entretener a mis compañeros

, escondía cartucheras en mi panza.

También he comido hasta reventar.

Unos de los records

, con 15 años: 13 empanadas caseras, fritas, de carne de vaca, hechas por mi abuela y cuatro milas a la napolitana, también caseras.

Otro: volviendo de Córdoba

, en La Carlota

, era el único de mi familia que pesaba la comida y metía casi cerca de kilo y medio cuando los demás conocían solo la medida gramo.

He festejado al enterarme que se iba a comer buseca

o puchero de chancho

, o asado

, o parrillada

, o arroz con pollo o mariscos.

Mi vieja me llevaba a la nutricionista porque crecía para los costados

y yo me escapaba a la casa de pepe (mi amigo) a comer chorizo o bondiola a las dos de la tarde.

O

capaz que cenaba asado los sábados

y me iba a lo de cacho y me clavaba de postre una mila completa con salsa casera.

Y me identificaba con Chris Farley o con Belushi.

Con el tiempo

, algunos alimentos (muchos)

se extinguen en medio de la cotidianeidad más apresurada y optamos por otros que son maravillosos.

Una ensalada

, legumbres

, milanesas al horno

, tartas

, arroz

, limón

, banana

, lavanda

, semillas

, cebolla

, ajo

, etc.

Pero, en definitiva

, sé lo que es ser gordo y disfrutar dionisiacamente de la comida hasta escuchar cómo se sube de peso.

Los domingos

, de entrada

, pastas,

y después se veía si se morfaba pollo o carne al horno con papas (crecí en una familia en la que el "primo piato" era infaltable).

Ayer por la tarde regresé a mi gordura.

La vi cuando mi vieja puso la fuente con tallarines y salsa sobre la mesa.

Fermín

, el sobrino de dos años

, miró la fuente

, sonrió y festejó.

Yo le hice la segunda y lo acompañé.

En relidad, tod@s l@s que estábamos en la mesa.

Y

, si,

morfamos.

Me pregunto si será que las familias necesitan de un gordo que engorde carcajadas.

No sé.

En cuanto a vos

, fermincho o "chicho",

como ya te dice tu hermano mayor

, disfrutá y hacé deporte.

Epílogo, familia reunida.

Aclaración: quien lea esto como una apología al exceso desconoce la belleza de la cocina, del comer y del aprendizaje que ella demanda para con nuestros cuerpos

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